Dicen que las canas envejecen a las mujeres y convierten en más interesantes a los hombres… ¿? Ésa es una creencia social bien arraigada que casi nadie se atreve a cuestionar, especialmente las mujeres.
Estoy en esa edad en que las mujeres nos vamos instaurando plenamente en la madurez, edad en la que suelen aparecer las canas y otros signos de envejecimiento. En esta sociedad tan poco libre, plagada de mandatos y tiranías acerca de cómo se debe vestir, peinar y actuar una mujer me pregunto… ¿Qué pasa con las canas?
He conversado con muchas mujeres y hombres acerca del tema. Parece que a ellos no les importa demasiado lucir unos cabellos más o menos blancos en su cabeza (más les preocupa la calvicie). Sin embargo, a muchas mujeres no sólo les molesta sobremanera lucir estos signos de madurez sino que insisten en que otras mujeres (especialmente si son jóvenes) no los luzcan.
Miro la imagen de Susan Sontag o incluso la de actrices como Nicole Kidman (sobre la que llovieron intensas críticas por lucir «entradas» canosas) o modelos como Kate Moss (que viven de su imagen) y me pregunto,
¿Qué tienen de reprobable las canas femeninas?
¿Podríamos llegar a sentirnos orgullosas de lucirlas?
Ellos sí. ¿Por qué esta diferencia en pleno siglo XXI?
¿Qué opináis?